Considerada por críticos y analistas internacionales como una de las mejores películas de la historia del cine, el estreno de "Los niños del paraíso" se estrenó durante la Francia liberada, pero su rodaje se realizó secretamente en plena ocupación nazi. El hecho de que fuera dividida en dos partes se atribuye al interés por eludir la prohibición de los nazis de películas de más de 90 minutos. Pieza fundamental del denominado "realismo poético" y nominada al Oscar® en la categoría de Mejor Guión Original, se conserva como toda una joya del arte cinematográfico.